Con el corazón
Amigos
míos, como tengo por costumbre, quiero participaros, algo que me ha llenado
de gozo.
“GRACIAS
POR SEGUIR A ESTA POBRE SENTIMENTAL”
CARTA A MIS PADRES
Queridísimos padres:
Hoy va mi mensaje para vosotros.
Sí, mamá, con tu permiso y sabiendo el amor tan
grande que siempre profesaste a mi
padre, se que te sentirás orgullosa lo
mismo que yo.
Sí,
padre mío, te ofrecieron la alcaldía de la zona, y tu siempre la rechazaste, porque el amor
que le tenías al lugar que te vio nacer era inmenso.
Y
así fue como, sin que nadie ni nada te obligara, fuiste pidiendo ayuda, aquí y allí, para que
este rincón de Andalucía, fuese lo más digno posible.
Un
día empezó tu lucha. Primero las
escuelas, para que los niños tuviesen maestros competentes.
Arreglar
la Camilla.
Adecentar
el cementerio, etc. etc. etc.
Eso,
así dicho, parece sencillo, pero fueron, días, noches, semanas, años…
Yo
desde pequeña, viví contigo ese
afán de que el entorno, en nuestro
terruño, fuese placentero.
Una
de las anécdotas que más recuerdo, era:
Cuando venía por la zona algún maestro nuevo o sacerdote,
etc. –Preguntaba a algún vecino, por el
alcalde; la respuesta era siempre la misma: Si quiere alguna información o
ayuda, póngase en contacto, con Fernando Gámez, vive en tal sitio.
Así
era, tú dejabas el trabajo, y te ponías presto a su disposición.
Pero
aquí viene lo bueno, aquellos niños ya eran mayores, y… apareció
algo que llegó a tus oídos, se llamaba,
“Teleclub”.
Sin
dudarlo te pusiste mano a la obra,
-nunca mejor dicho- cediste un
terreno, convocaste una junta, y con
ayuda de aquí y de allá, se levantó un local para los vecinos, y especialmente
los jóvenes, para que tuviesen un lugar donde reunirse.
-biblioteca,
televisión, exposiciones de pintura, juego de ajedrez, mini - bar,
bailes, etc.
Pero
cambiaron las leyes, y con ello, no se
podía llamar este recinto “Teleclub”, seria “Club cultural”; y así fue que tu
aconsejaste, que se podía llamar,
“Club Cultural Salvador Rueda”.
En
memoria de nuestro maravilloso vecino
y insigne poeta.
Padre
mío, llego al punto en el cual, la
emoción me embarga.
Sí, hace unos días me llamó un miembro de la
junta.
(Ay
que resaltar, que a pesar de tu ausencia, el club sigue su camino
trazado), y he aquí, ¡OH!, mi queridísimo padre, (como era
de esperar la familia sigue siendo socios del club), habíamos comentado, que
ya era hora, de legalizar y pasar por el registro, todos los derechos del club.
Y de esta forma me llaman por teléfono este chico, y me dice: Mariluz,
ya tenemos la documentación preparada,
pero hemos pensado, y con tu
permiso,
Que
al legalizarlo totalmente, querríamos que se llamase, “CLUB CULTURAL FERNANDO GÁMEZ.”
Papa
yo sé, que tú te lo mereces todo, pero
por DIOS;
Me
quedé, sin poder hablar, la emoción fue
tal, que el chico se preocupó, (lloraba
no podía contestarle.)
Como
pude le expresé el gran agradecimiento
a todos.
Los
vecinos, siempre reconocieron tus desvelos y por ello han tenido este detalle.
Yo
sé que un día escribiste el poema expuesto a continuación, su título lo dice
todo, “SOY FELIZ”.
Hoy
se suma algo más a tu felicidad.
Mamá y yo siempre nos sentimos orgullosísimas de ti.
Y
así con todo mi amor, sigo mi camino para que llegado el día pueda tener el
gozo, de estar con vosotros.
De su libro, “retazos”.
Soy feliz.
Amo la inmensidad de los Cielos.
Amo al Sol, Amo la Luna.
Amo la hermosura de la Tierra
y amo al que me dio tanta fortuna.
Tengo una familia. Tengo a Dios.
Tengo PAZ en mi alma. Tengo alegría.
Y tengo un Cielo estrellado cada noche,
que me hace
augurar un nuevo día.
Admiro la gran Naturaleza.
Al Río caudaloso que murmura.
El valle, la colina, el escarpado
y al prado que brinda su hermosura.
Deseo la
PAZ eternamente.
Deseo termine la indigencia.
Deseo el triunfo del Amor,
para qué impere la beneficencia.
Pregono la Amistad por doquier.
Pregono
su magnitud y pureza.
Y pregono la unión de los pueblos
porque temo de la guerra su crudeza.
Canto a la vida complacido.
Canto con Amor a la mujer.
Al mundo infantil que nos precede
y al mañana con grato amanecer.
Sonrío
alegremente cuando ríe un niño.
Río a carcajadas si me hacen reír.
Aparto si puedo, toda congoja,
y combato con energía el sufrir.
Soy Feliz, Tú, me das la esperanza.
Soy Feliz, porque tú me iluminas.
-Soy
Feliz, porque lo tengo todo.
-Hasta
alegran mi desván las
golondrinas.
FERNANDO
GÁMEZ . 1985